sábado, 7 de mayo de 2011

Infinitas gotas de lluvia....


Contemplo desde la ventana caer la lluvia, que es como una cortina compuesta de infinitas gotas que mojan el suelo y salpican los cristales.
Los árboles se mecen suavemente por una brisa leve como agradeciendo el baño líquido que hará brotar cuando salga el sol una explosión de verdes.
La lluvia tiene un efecto casi hipnótico cuando la miras durante un rato. Las gotas se funden unas con otras y crees ver una lámina tupida, fresca, una inmensa catarata transparente.
La vida, como la lluvia, está formada también por infinitas gotas de sensaciones, que se mezclan unas con otras, empapan nuestros sentimientos y hacen nacer en nosotros la experiencia.

Sed felices.

1 comentario:

  1. Elena, como percibirás en mi blog, también yo siento fascinación por la lluvia; por la trasparencia y la mansedumbre del aguacero.
    También paso la mañana frente al cristal. A veces la naturaleza escribe poesía.

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